Has volado.

Quiero tu calor en mis noches, mis frías noches
Pero solo tengo soledad, y un triste recuerdo
He quedado en el olvido,
Completa desolación...

Quisiera romper las cadenas de mi ser,
Sacarme el sentimiento que me ata,
Dejar atrás tu recuerdo, mi tormento...
¿Qué hay tras el velo de mis ojos?

¿Que yace tras el velo de luto de mi alma?

El olor de tumbas viejas y empolvadas

Lágrimas de sangre, tormentos,

Llantos corrosivos y asfixiantes,

Gemidos de dolor, de miedo
Desconsuelo.

Ya no creo, no creo en el silencio
Porque a mi llegan voces del pasado,
En mi mente divagan los recuerdos
De soledades y gritos en medio del silencio;
En mi alma yace un sabor a vino y rosas,
Aún habita en mí el aroma de tu piel en las mañanas,
Y se repite una y otra vez tu imagen… Tus manos en mi cuerpo…
Tu inmensurable ternura, en mis ojos habita tu mirada…
Mas no te tengo, has caído cual hoja en otoño
Has volado libre como el cuervo
Que queriendo libertad se entregó al frío,
A lo incierto… has volado…

...

Es solo el silencio encerrado en las paredes de mi mundo...

Algo que escribí una oscura tarde, en medio del dolor y el desespero.

…Y tú seguiste el camino bajo la tempestad
Con las botas empantanadas y el corazón arrastrándose
Te alejabas, te perdías en la niebla,
Mientras mi voz tan solo golpeaba al vacío…
Fuimos entonces dos fantasmas del pasado,
El despojo de un rojizo y desnudo atardecer,
Éramos entonces un vacío resultado,
De hojas blancas, manchadas de amor y penas.

De nuevo sola,
Respiro aire envenenado.

Bajo la niebla un cuervo devoraba su corazónCarcomía el silencio de un alma inerte
Que entre brumas se desintegraba
Y redimía sus penas, su amargura y su eterno dolor.